Tweet |
|
A raíz del problema que vimos el fin de semana pasado, en que personas, hijos de Dios, cometieron la barbaridad de destruir templos, el Padre Roberto nos invita a reflexionar sobre el amor.
El mismo Señor a quien crucificaron nos dejó un mandamiento nuevo: el de amarnos, los unos a los otros, como él nos ha amado. Y frente a este ejemplo, debemos amar siempre, también a nuestros enemigos.
Revisa a continuación la reflexión completa de nuestro párroco, que nos explica cómo poner en práctica este amor, como nuestra respuesta frente a toda realidad.